¿Qué es el frenillo labial y para qué sirve? Te contamos cuándo puede ser necesario operarlo para evitar las consecuencias negativas que puede provocar una anomalía de este tejido.
Índice de contenidos
¿Qué es el frenillo labial?
El frenillo labial es un tejido fibroso que une la encía con el labio, tanto en la parte inferior como superior de la boca.
Por tanto, todas las personas contamos con dos frenillos labiales: el frenillo labial superior y el frenillo labial inferior.
Generalmente, el de la parte inferior tiene un tamaño y grosor más pequeño que el de la parte superior.
¿Cuál es la función del frenillo labial?
La función principal del frenillo labial es unir la encía con el labio, es decir, una parte de la boca que se mueve con otra parte fija.
En términos más especializados, el frenillo labial sirve para conectar el labio con la encía adherida y la papila interincisal.
Tipos de frenillos labial
Podemos distinguir dos tipos de frenillo lingual y tres tipos de frenillos bucales en total:
Frenillo labial superior
Une el labio superior con la encía superior. Se trata de una banda de tejido fibroso que va de la cara interna del labio a la línea media de la encía del maxilar superior.
Frenillo labial inferior
Es el que une el labio inferior con la encía inferior. Es un repliegue en la mucosa bucal que se sitúa en la línea media.
Frenillo lingual
Es el que une la lengua con el suelo del paladar.
¿Qué problemas ocasiona el frenillo labial?
Los frenillos labiales son genéticos, lo que significa que ya nacemos con ellos. Por tanto, generalmente, el frenillo lingual es normal. Sin embargo, hay casos en los que pueden aparecer defectos que afecten al desarrollo de los dientes o que dificulten la alimentación o el habla.
Cuando este frenillo es más largo, más corto o más grueso de lo habitual, puede generar ciertos problemas como:
- Si el frenillo labial superior es muy largo, provocará diastema (los dientes centrales quedarán separados). Eso afecta a la estética, la mordida y a la higiene, lo que también provoca inflamación en la zona.
- Si el frenillo labial superior es corto, puede dificultar la movilidad del labio, lo que afecta a la pronunciación, al sellado de los labios (y, por tanto, a la respiración) y, siendo bebé, a la lactancia.
- Si el afectado es el frenillo labial inferior, las consecuencias son menos graves pero será más complicada una correcta higiene dental. Eso provocará que el frenillo labial inferior esté inflamado y dará lugar a enfermedades periodontales.
¿Cuándo es necesario operar el frenillo labial?
En ocasiones, se hace necesario operar el frenillo labial. A esta operación se la conoce como frenotomía y consiste en una simple incisión para eliminar todo el frenillo.
Cuando, como hemos visto en el apartado anterior, hay limitación de movimientos, molestias, dificultades para hablar y comer e incluso para tener una correcta higiene bucodental, se recomienda la operación del frenillo lingual.
Con los avances médicos y tecnológicos, las molestias para el paciente son mínimas.
¿Qué ocurre cuando se rompe el frenillo labial?
En niños, es frecuente que acabe el frenillo lingual roto. Un simple golpe jugando puede tener esta consecuencia.
En ese caso, el traumatismo y el sangrado son inevitables.
Pero, una vez se controla el sangrado y se pasa el susto y el dolor, no debe revestir mayor gravedad, siempre que no se haya causado con el golpe ningún problema estético o funcional.
¿Qué pasa si se le corta el frenillo labial a un bebé?
Si se rompe el frenillo lingual del bebé, tendrás que cortar el sangrado y ponerle hielo y presionar para evitar la inflamación. En caso de que se produzca, siempre es recomendable acudir al médico para que revise que todo está bien.
No obstante, más allá de que se quede roto de forma permanente, no tiene por qué suponer ningún problema para su desarrollo.
¿Qué puedo hacer si mi bebé tiene frenillo?
Si el frenillo de tu bebé presenta alguna anomalía de las mencionadas, puede ser necesaria una frenotomía, que se hará con o sin anestesia en el hospital o en cualquier consultorio médico.
El médico examinará al bebé y cortará el frenillo con unas tijeras esterilizadas. Frenará el sangrado y, como hemos visto en el apartado anterior, no tendrá ningún problema posterior.
¿Y si no se corta el frenillo? Entonces, es posible que tenga problemas para comer, para hablar correctamente, para el desarrollo bucodental, para la respiración y, en el futuro, el frenillo lingual en adultos y niños, dificultará la correcta higiene bucodental.
¿Cómo se cura el frenillo del labio?
Cuando se hace necesario eliminar el frenillo labial, o se rompe por accidente, se puede curar de una forma muy sencilla:
- Limpiar la zona con suero fisiológico (o agua, en su defecto).
- Comprimir con los dedos para detener el sangrado.
- Poner hielo para evitar la inflamación.
En cualquier caso, es aconsejable acudir a urgencias para que un médico examine que no se han producido daños.
Los días posteriores a la rotura, se recomienda dieta blanda y fría y evitar alimentos ácidos o que puedan acumularse y contaminar la herida del frenillo labial inferior o superior. A eso hay que sumar una buena higiene con enjuagues para evitar infecciones y poner hielo en la zona. Si hay dolor, el médico podría prescribir algún medicamento.